Vino de Madeira

El suelo y el clima únicos de la Isla de Madeira, así como el proceso de producción y el tipo de uva cultivada, han contribuido a que del Vino de Madeira haya alcanzado un prestigio inigualable a lo largo de los tiempos. 
Elegido para celebrar la Independencia de los Estados Unidos el 4 de julio de 1776, elogiado por Shakespeare en algunas de sus piezas, admirado por reyes, príncipes, generales y exploradores, el Vinho de Madeira es, sin duda alguna, una auténtica joya.
Apreciado en todo el mundo y con un pasado histórico testimoniado desde hace más de cinco siglos,  es uno de los símbolos de la Isla de Madeira.
Podemos apreciar el trabajo de los locales a lo largo de los siglos, en las viñas cultivadas a mano en pequeños recintos de tierra, conocidos por poios, a veces, en pequeñas parcelas de terreno en las laderas montañosas de difícil acceso.
Son más de 30 las castas del vino de Madeira, sin embargo, las más nobles son la Sercial, Boal, Verdello y Malvasia.
De los vinos secos destaca la casta Sercial. Ideal como aperitivo, este vino de color claro es ligero y muy perfumado. El Verdello encabeza los vinos semi-secos; delicado, bastante perfumado y de color dorado, es el más indicado para acompañar las comidas. Semi-dulce, suave, noble, aterciopelado y de color dorado oscuro es la casta
Boal, siendo la más recomendada para el asado y el postre. 
Entre comidas o en el postre son pocos los que se resisten a la casta Malvasia, que produce un vino dulce, con cuerpo, de aroma intenso y color rojizo.
Los que aprecian la enocultura deberian visitar Madeira en septiembre para asistir y participar en las vendimias y en la Fiesta del Vino de Madeira, que constituye un homenaje a este producto ancestral y reconocido más allá de nuestras fronteras.
Imagen:http://vistadaserra.blogspot.com

Share:

0 comentarios

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...